TUVO QUE VENIR LA COVID 19 A MOSTRAR NUESTRAS CARENCIAS

El destino nos trajo una situación sanitaria extraordinaria, la epidemia del COVID 19, que afectó a la población de nuestro país, al igual que en otros, sin distinción de clases, raza o religión. Es una enfermedad infecciosa contra la cual el individuo por sí solo difícilmente puede combatir, y afectando a todos,  necesita obligatoriamente de la actuación eficiente de nuestros gobiernos y de todos nosotros, no solo para combatir y controlar esta enfermedad, sino también para paliar los efectos negativos que ha tenido sobre el desarrollo de nuestras vidas.

Sin duda, creo que es importante que haya partidos políticos con intereses socio-económicos y programas diferentes. Los ciudadanos estaremos más cercanos a uno u otro partido, según estos valores, pero cualquiera de ellos que sea elegido para gobernarnos, ya sea a nivel comunitario, nacional, autonómico o municipal, debe velar por nuestro fortalecimiento y crecimiento socio-económico,  por proteger a todos sus ciudadanos, por saber identificar con suficiente antelación los problemas, y por poner los medios y medidas necesarias a disposición de la población para poder resolverlos. Tuvo que llegar la COVID 19 a mostrarnos que los gobernantes que tenemos no han sabido prever los problemas, ni actuar como era necesario, y que el sistema que teníamos y que nos habían dicho que era bueno resultó no estar a la altura de esta situación.

Considero que el gobierno contaba con la información de todo lo que ocurría en China, Italia y de lo que estaba pasando en España o en otros países, las alarmas estaban empezando a sonar y, sin embargo, no tuvieron previsión, tenían que haber adelantado sus actuaciones, e inevitablemente se nos echó encima de una manera desbordante, los contagios ya eran muchos y nos vimos obligados en algunos casos a paralizar nuestras vidas, y en otros a realizar unos cambios que no teníamos previstos ni aprendidos en un intento de continuarlas.

Opino que los gobiernos tienen que ser capaces de detectar las debilidades del sistema, reforzar con los medios necesarios algunos ámbitos para minimizar los daños, y sin embargo no  fueron sensibles a las pérdidas de tantas personas mayores, ni a las carencias de las residencias. Ni  el gobierno central ni el autonómico supo en la primera etapa de esta pandemia combatirla en el punto más débil que se tenía.

Otro aspecto negativo a reprocharles es el hecho de confiarse durante los meses que parecía que la COVID estaba controlada, sabiendo que no había desaparecido y previsto su regreso. Por último, no debían olvidar aquella frase que dice que “la unión hace la fuerza”, y hoy más que nunca gobierno nacional y autonómico deben estar unidos, para evitar muertes y poder controlar los contagios; sin embargo, no ha sido así, y en el caso de Madrid, han mostrado un enfrentamiento continuo, se han culpabilizado entre ellos en lugar de trabajar juntos, ha sido un pulso político que ha dejado a la ciudadanía como meros números entre sus manos.

En resumen, y reconociendo que esta maldita epidemia está haciendo tambalear a muchos  países, con independencia del Gobierno y medios que tengan, desde mi punto de vista, creo que la actuación de nuestras autoridades no está siendo la más adecuada, y que la situación en la que ahora estamos es responsabilidad de todos los políticos,  sin reprochar nada a los españoles, que en general  han acatado las medidas adoptadas de una manera ejemplar. Conseguiremos vencer a la COVID, pero probablemente los ciudadanos no olvidaremos que como enemigo no teníamos solo esta epidemia, sino también teníamos a nuestros políticos.